Cocinar es una actividad que no solo alimenta el cuerpo, sino también el alma, y cuando te embarcas en la tarea de preparar un pan amasado con tus propias manos experimentas una gratificación profunda y una sensación terapéutica.
En esta ocasión te enseñamos a hacer un pan de centeno en casa, el centeno tiene muchas propiedades beneficiosas para nuestro cuerpo y comerlo diariamente es una forma excelente de cuidar nuestra salud.
¿Qué es el pan de centeno?
El pan de centeno es simplemente pan elaborado con harina de centeno. El centeno tiene un sabor terroso, y la cantidad de centeno utilizada en combinación con otras harinas determinará el grado de sabor a centeno del pan. A menudo, el pan de centeno se prepara con adiciones como melaza y cacao en polvo, que aportan color y sabor.
Si bien es posible hacer un pan que esté hecho 100% de centeno, para algunas personas tienden a ser bastante densos y pesados. Si quieres obtener un pan más ligero que conserve el buen sabor a centeno, puedes mezclar diferentes tipos de harinas y hacer por ejemplo un pan de centeno y espelta que será también muy nutritivo, delicioso y saludable.
¿Cuál es la mejor forma de aprender a hornear pan de centeno?
No creo que sea fácil aprender a hacer pan solo leyendo al respecto. Lo que realmente ayuda es meter las manos en la masa y aprender directamente de alguien que pueda decirte: «¿Ves? Esta es la consistencia correcta para la masa». Hacer pan es algo que simplemente debes practicar. Cuanto más pan hagas, mejor te volverás en ello.
Formas de disfrutar del pan de centeno
El centeno es esencial para una buenas tostadas con tomate y jamón, para un sandwich de queso a la parrilla, o para unas tostadas con huevo y aguacate.
¿Tienes pan de centeno sobrante que se está poniendo duro? Puedes convertirlo en migajas de pan y congelarlo para usarlo más tarde. Puedes espolvorearlas sobre ensaladas y cocidos para una textura más crujiente.
El objetivo es no desechar nada 😉
Almacenamiento y congelación del pan de centeno
El pan de centeno se conservará durante varios días a temperatura ambiente si se guarda en una bolsa de papel. Para extender su vida unos días más, puedes envolverlo en una bolsa de plástico.
El pan de centeno también se congela muy bien. Envuélvelo en papel film y papel de aluminio, y luego guárdalo en una bolsa para congelador, te durará hasta tres meses. Descongélalo a temperatura ambiente, recalienta en el horno y estará listo para comer.
Receta Pan de Centeno Casero
TIEMPO DE PREPARACIÓN: 30 minutos
TIEMPO DE COCCIÓN: 40 minutos
TIEMPO TOTAL: 70 minutos
PORCIONES: 24 porciones
RINDE: 2 panes
Ingredientes:
- 2 tazas de Harina de Centeno Gigantón
- 2 paquetes de levadura seca activa (4 1/2 cucharaditas o 16 gramos)
- 2 1/2 tazas de agua tibia (apenas tibia al tacto)
- 2/3 de taza de melaza (regular, NO melaza negra)
- 2 cucharadas de semillas de alcaravea (opcional)
- 1 cucharada de sal
- 1/4 de taza de aceite vegetal
- 1/4 de taza de cacao en polvo (sin azúcar)
- 5 tazas de Harina de Pan
¿Cómo elaborar el Pan de Centeno? :
- Disolver la levadura: Disolver la levadura en el agua tibia con la melaza. Colocar la mezcla de levadura en un bol grande de metal.
- Hacer la masa: Agregar las semillas de alcaravea, la sal, el aceite vegetal, el cacao en polvo, 2 tazas de harina de centeno y luego 2 tazas de harina de pan, mezclando después de cada adición con una cuchara de madera.
- Añadir más harina de pan: Agregar más harina de pan, una taza a la vez, hasta que la masa no esté tan pegajosa y sea demasiado difícil de mezclar con la cuchara de madera. En ese punto, esparcir media taza de harina sobre una superficie grande, plana y limpia y colocar la masa sobre la superficie.
- Amasar la masa: Amasar la masa presionando con el talón de la mano, estirándola, girando la masa un cuarto de vuelta, tirando de la masa hacia ti y luego presionando y estirando nuevamente. Amasa durante 5-7 minutos, o hasta que la masa esté suave y elástica.
5. Dejar que la masa repose: Unta un poco de aceite vegetal en un bol grande y coloca la masa en él, girálo para que se cubra de aceite. Cubre el bol con film transparente o un paño húmedo. Deja reposar a temperatura ambiente hasta que haya duplicado su tamaño, de 1 a 1 1/2 horas.
6. Divide la masa: Presiona suavemente la masa levantada para liberar algo de aire. Volca la masa sobre una superficie ligeramente enharinada, amásala unas cuantas veces y luego divídela por la mitad con un cuchillo afilado.
7. Forma los panes: Da forma a cada mitad en un pan. Coloca los panes de masa en moldes para pan engrasados de 8×4 pulgadas, o en una bandeja plana para hornear que se haya espolvoreado con harina, dependiendo de si quieres hornear los panes en moldes o directamente sobre una piedra para hornear. Cubre con film transparente o un paño húmedo.
8. Deja que los panes reposen: Deja que el pan repose nuevamente, esta vez sin duplicar su volumen, sino aumentando aproximadamente la mitad de su volumen, unos 30 a 45 minutos, la mitad del tiempo que la primera subida. La masa debe asomar por encima del borde del molde (si se usa un molde para pan)
9. Precalentar el horno a 350°F (176°C ) : Si estás usando una piedra para hornear, colócala en el horno. Precaliéntala durante al menos media hora antes de hornear.
10. Hornea los panes: Haz algunos cortes en la parte superior de la masa justo antes de meterla en el horno. Coloca los panes en el horno. Si tienes un rociador, rocía un poco de agua sobre la masa durante los primeros 10 minutos de horneado. Hornea durante 40 a 50 minutos, o hasta que estén listos. El pan debe sonar hueco al golpearlo.
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